Las cosas en España no están nada bien en el panorama del empleo, pero parece que algunas de las legislaciones que se plantean otros países resultan cuanto menos ridículas para el ciudadano de a pie, ya que coartan sus libertades.
Tengo que reconocer que he tenido que leer varias veces la noticia para darme cuenta de que lo que contaban eran realmente verdad y no solo fruto de mi asombro y quizás de mi imaginación. Y es que ahora Reino Unido quiere que los trabajadores trabajen al máximo, so pena de multa. La idea es que aquellos que no trabajen para ganar más dinero por decisión propia, tendrán en su declaración de la renta una penalización, ya que el gobierno de Londres quiere que los ciudadanos sean más productivos, y con ello aumentar las recaudaciones del Estado.
La verdad es que a mi me ha dejado alucinada la propuesta de la nueva medida laboral, porque es increíble como coarta la libertad de las personas. O sea, que ahora no vamos a decidir ni siquiera cuantas horas trabajamos, porque todo lo que sté por debajo del horario común y no sea por causa de la empresa tendrá estas penalizaciones.
Lo cierto es que de momento la medida se está debatiendo, pero hay que decir que es tan surrealista como que va en contra de la libertad de decisión de las personas. ¿Acaso la constitución no recoge el trabajo como un derecho? ¿Y si es un derecho, puede el Estado decidir cuánto debería trabajar un ciudadano en horas? ¿Saben los políticos en dónde se meten con tanta tontería?
Imagen | aigle_dore
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