En condiciones normales, los tipos de interés al alza reducen el atractivo del metal dorado.
El 21de marzo pasado, la Reserva Federal de los Estados Unidos, la Fed, ha subido los tipos de interés en otros 25 puntos básicos, hasta situarlos en el nivel del 1,5-1,75%. Sin embargo, lo curioso, según los expertos consultados por iFOREX, es que los tipos de interés a corto en EE.UU. han subido de forma sustancial desde 2017, en tanto que la percepción del riesgo de los inversores ha permanecido relativamente apagada, tal y como evidencian los indicadores de stress en los mercados financieros.
Al mismo tiempo, el precio del oro ha mantenido la tendencia alcista que inició en 2016 junto a un crecimiento constante en la cantidad de dinero. Y eso no es normal, explican a iFOREX, porque unos tipos de interés más altos van contra las subidas en el precio del oro. Cuando suben los tipos, el coste de oportunidad de tener oro aumenta y los inversores se decantan por otros activos.
No obstante, al mismo tiempo, unos tipos de interés más altos aumentan el riesgo de una nueva crisis dado que los costes del crédito se han recortado de forma artificial a mínimos durante la última década. Como resultado, señalan a iFOREX, la actividad económica se ha hecho muy dependiente del dinero barato.
Así, los precios de ciertos activos, como las acciones y los inmuebles se han visto impulsados al alza por los bajos tipos de interés, lo que ha impulsado el gasto y unas inversiones cuya rentabilidad depende de que el entorno de tipos bajos continúe. Si los tipos subieran, la presión de los ajustes sería inevitable y disminuiría la actividad económica.
Los expertos consultados por iFOREX se plantean la cuestión de si las economías pueden manejarse con costes financieros más elevados, en tanto que los bancos centrales consiguen llevar los tipos a un nivel que no impulsa el crecimiento económico por encima de sus posibilidades ni lo frena en demasía.
Y como la respuesta es que los bancos centrales (la Fed en la crisis de 2000/2001 y en la crisis 2008/2009, por ejemplo) suelen equivocarse, muchos inversores profesionales llevan desde principios de 2016 acumulando oro con fuerza, tal y como demuestran las cifras de los ETF (fondos cotizados) en oro ¿Por qué lo hacen? Lógicamente, si no lo hacen por el interés que ofrece con tipos al alza, lo hacen para proteger su cartera.
De este modo, los inversores deberían pensar cómo navegar en un escenario en el que los bancos centrales retiran los estímulos (suben el precio del dinero) en su justa medida y en el momento adecuado para evitar daños colaterales a sus inversiones. Y ahí es donde muchos de ellos miran los ETFs y CFDS sobre el metal dorado, porque no se trataría de adquirirlo por su potencial alcista (a estos niveles es reducido) sino por su capacidad de protección ante lo que pueda venir, incluyendo tensiones geopolíticas.
Por último, los expertos consultados por iFOREX recuerdan que los ciclos de tensionamiento monetario han acabado en lágrimas en bastantes ocasiones por lo que la idea de tener un porcentaje de la cartera en invertida en oro como protección no es ninguna tontería.