Lo importante es la planificación, como venimos insistiendo en el blog. Por eso, una buena manera de ahorrar dinero día a día es tener en cuenta cuál es la suma que podemos gastar, ya que de pasar esa barrera los problemas se pueden multiplicar en el futuro.
Esta metodología acarrea directamente dos consecuencias: si gastamos más de lo que previmos en un principio, a fin de mes las cuentas no cerrarán como pensábamos y ello puede traer problemas más serios. Por otra parte, de no poder ahorrar como lo habíamos planificado, las ganas de continuar en esa senda disminuyen y todo se desmorona.
Recordemos: si gastamos de más, es difícil que al otro día podamos gastar menos, porque los cálculos se planifican con antelación para gastos mínimos. Una conducta correcta con el dinero nos brinda beneficios y nos ahorra inconvenientes futuros.