¿Cansado de pagar una millonada por una tarifa de Internet que no va todo lo bien que te gustaría? Pues ¡espabila! No te quedes parado y compara las diversas ofertas, con sus respectivas características, y cámbiate de compañía. Porque en la comparación está la clave para ahorrar.
¿Cómo ahorrar con Mister Comparador?
Y para que este proceso no se dilate mucho en el tiempo, te presentamos Mister Comparador. Pero ¿qué es Mister Comparador? Es una web que en un minuto te permite comparar los precios de las diversas compañías. Busques lo que busques, está aquí. Si quieres entrar en la era de la fibra óptica, deberás ir a una de las dos pestañas que cuentan con este tipo de tecnología (solo fibra óptica o fibra óptica con tarifa móvil incluida); en cambio, si crees que con la tecnología ADSL te es suficiente, también podrás comparar los precios de las diversas compañías.
Fácil y simple. Vas a la pestaña que quieres, ves las diferentes ofertas, lees las opiniones de los diferentes usuarios y eliges la que más te convence. ¡Tan sencillo como esto! La misma web te redirigirá a la propia página de la compañía para que puedas contratar la oferta.
Y si no lo tienes claro, te puedes dejar ayudar por el forzudo del ahorro, quien con solo dos preguntas sabrá asesorarte y decirte cuál es la oferta de Internet que más se adapta a tus necesidades.
Y es que el bigotudo quiere que ahorres tiempo y dinero para que puedas emplearlos en otras cosas que te produzcan más placer. Visítale y en menos que canta un gallo tendrás una nueva tarifa más adecuada a los tiempos que corren.
¿Qué conexión tienes?
Antes de proceder a un cambio de compañía, lo primero que debes averiguar es la velocidad de fibra o ADSL que tienes. ¿Cómo hacer eso? Pues en la misma web de MisterComparador tienes un test de velocidad en el que puedes comprobarlo de manera sencilla. Y, por si tienes dudas de cuál es la media de otros usuarios, puedes ver el estudio sobre velocidad ADSL que han publicado. Así, con estos datos, podrás saber qué datos deberás analizar a la hora de cambiarte de compañía.
¡Ahora ya está en tu mano qué hacer!