Una gran forma de ahorrar es buscar formas de “Automatizar el ahorro” es decir que siempre ahorremos una cantidad similar sin darnos cuenta o sin estar esforzándonos por ahorrar una determinada cantidad o porcentaje de dinero.
Varios autores de finanzas personales recomiendan el contratar servicios financieros en los cuales se nos descuente dinero directamente de la nómina para así “ahorrar primero y gastar después en lugar de gastar primero y ahorrar lo que sobre” (si es que sobra algo).
Una variante de estas formas de ahorro automático son las cuentas calderilla, estas son cuentas en las cuales puedes ahorrar “el vuelto” cada vez que realizas una compra, sin embargo con estas cuentas deberás tener vinculada una tarjeta de crédito o débito.
La forma de operar de estás quizá ya la conozcan, al realizar una compra con tarjeta, se carga a la misma una cifra redondeada que por lo general es el inmediato superior múltiplo de cinco, es decir que si se realiza un pago por 46 euros entonces se cargará a la tarjeta una cantidad de 50 euros, ahorrando así 4 euros en la cuenta calderilla.
No podemos negarlo es una estrategia de las entidades financieras para promover sus servicios y atraer clientes (y además promover el uso de tarjetas que a mi parecer son una de sus principales fuentes de ingreso), pero las tarjetas de crédito o débito puedes servirnos tanto para nuestro beneficio como para nuestro perjuicio dependiendo de cómo las utilicemos.
Por el momento una de las entidades que ofrece este servicio es Caixa Galicia que ofrece su “Cuenta Calderilla” la cual ofrece una generosa remuneración de 5% TAE.
Vía: Yahoo