El vivir justo para el mes es uno de los problemas más comunes existentes, la gente llega a fin de mes y una determinada parte de la población pareciera que todo lo que aspira es sobrevivir hasta el próximo cobro, este es un efecto conocido como la Ley de Parkinson que indica que: los gastos tienden a igualar y hasta superar los ingresos a menos que se haga algo al respecto.
Una de las filosofías que más ayuda a las personas que no tienen la costumbre de ahorrar es el considerar el ahorro como un «gasto fijo» como si fuera el pago de una mensualidad educativa o un crédito mensual, al considerarlo como un gasto fijo puedes empezar a actuar como si lo fuera.
Aaunque se requiere igualmente autocontrol el tener este pensamiento ayuda a reducir los esfuerzos de voluntad que muchos pueden tener al ahorrar, esta filosofía no solo colabora en el inicio del hábito de ahorrar sino también a mantenerlo logrando poco a poco el sólido desarrollo del hábito de ahorro.
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