Las vacaciones no son un momento ideal para el ahorro, pero si se puede hacer hincapié en que no ahorrar no significa derrochar el dinero. Por eso, algunas cuestiones como la comida o las salidas nocturnas mientras disfrutamos de las vacaciones habría que tener en cuenta.
La comida es imprescindible, y lo ideal es no comprar productos que se desperdicien rápidamente, como fiambres o embutidos. Lo mejor es hacer una dieta rica en frutas, ya que son alimentos que duran bastante más en el tiempo y no se desperdician. Respecto a las salidas, lo mejor es dividir el dinero y salir con una suma determinada, que por lo general es nuestro total dividido por las noches que estaremos de vacaciones. De esta manera, nos aseguramos de que no nos quedaremos sin plata hasta el último día.